Cuando comenzamos con la
pastelería-repostería creativa, vemos tantas herramientas y artilugios que
parece que hay que ser un manitas para realizar estas tartas. Nada más lejos de
la realidad.!!!
Como todo en cocina, los utensilios facilitan nuestro trabajo, pero no son
indispensables. Podemos montar unas claras a punto de nieve en un par de
minutos con una batidora, o estar mucho más tiempo y “tirar” de brazo y
conseguir el mismo resultado.
Con unos pocos “imprescidibles” podemos conseguir resultados muy
profesionales y vistosos en nuestras tartas.
¿Qué utensilios necesitamos para conseguir un buen resultado y no naufragar
en el intento?
- Fondant. A título personal, os recomiendo comprarlo hecho, porque hacer fondant de nubes no sale todo lo rentable que parece. Entre comprar las nubes, la cantidad de azúcar glass que tendréis que utilizar, lo pringoso que es hacerlo y el tiempo que tardaréis en hacerlo, no compensa.Tenéis muchas marcas donde elegir (y haré otra entrada con una comparativa entre las que conozco y he trabajado). Personalmente me decanto por Sodifier, Credipaste o Satin Ice.
- Manteca Vegetal: aunque tiene varios usos, yo lo utilizo aplicándome un poco entre las manos para hacer el fondant más flexible mientras lo amaso y estiro, además prevenir que la pasta de goma se pegue a la superficie de trabajo.
- Rodillo: El de casa puede servirnos para tartas pequeñas, pero si queremos hacer una tarta un poco más grande, es conveniente invertir el dinero en comprar un rodillo de 50 cm, que nos servirá tanto para tartas grandes como pequeñas, y en poco tiempo habremos amortizado lo que nos costó.
- Base o Stand Giratorio: Nos permite ver de forma más precisa nuestra tarta desde todos los ángulos (puesto que podemos ir girando la base), y por tanto podremos realizar con precisión el corte del fondant que nos sobra cuando forramos la tarta, como alisarla a continuación y que obtengamos una acabado profesional. En Ikea podéis encontrar este modelo por 5€ .
- Tapete o superficie para poder trabajar el fondant. Yo utilizo un protector de escritorio que encontré en Ikea en la zona de “accesorios de escritorio”. Como es muy grande me permite trabajar con amplitud y comodidad, además cuesta sólo 6€.
- Paleta alisadora y rodillo pequeño. La paleta es imprescindible para conseguir el acabado perfecto en nuestras tartas, dejando toda la superficie lisa y al mismo nivel, cosa que no conseguiríamos utilizando las manos, además que dejaríamos marcas en la tarta. Podéis encontarla por 2-3 euros. El rodillo pequeño lo utilizaremos para estirar porciones más pequeñas de fondant, para hacer nuestras decoraciones.
- Colorantes: Antes de gastaros un montón de dinero en fondant de colores, recomiendo que comencéis con fondant blanco y vayáis tiñéndolo con los colorates por varias razones: El fondant tiene una fecha de caducidad de unos meses y si no se utiliza, poco a poco se reseca. Así que, cuando vais a utilizarlo (y por muy protegido que lo tengáis), habrá que tirar una buena parte porque estará muy duro. Sólo recomiendo comprar fondant de colores, para aquellos colores muy intensos como el negro y el rojo. Los colorantes tiene una fecha de caducidad mucho más larga y podréis conseguir una gama de colores mucho mayor que con el fondant de colores y además hacer las cantidades justas que vais a utilizar.
- Cortadores: pero no os volváis locos, comprar cortadores que puedan serviros para varios modelos y aprovechar los objetos cotidianos de casa como por ejemplo,vasos de diferentes tamaños para hacer círculos.
- Y por último, pinceles para poder pegar vuestras decoraciones a la tarta.
Y con todo esto ya podéis comenzar a realizar vuestras creaciones. Es
cierto que podemos poner muchas cosas más, pero hoy estamos viendo aquellos
materiales imprescindibles para comenzar nuestra andadura en el mundo del
fondant.
Espero que os resulte interesante esta entrada y si te ha gustado, déjame
algún comentario.
Hasta el próximo día.
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